Martín Lutero (1483-1546 d.C.) se hizo monje agustino a los 22 años a fin de encontrar la paz con Dios. Observó con absoluta diligencia todos los deberes de un monje católico (confesión, oración, devoción y buenas obras) pero pronto se vio inmerso en una desesperada lucha y en un profundo estado de alienación. Tenía la impresión de que cuanto más se esforzaba por seguir el camino monástico, más distanciado de Dios se sentía. Al cabo de 8 años de lucha, de repente Lutero se descubrió respondiendo profundamente a la enseñanza de San pablo referente a "la justificación por la fe". Se dio cuenta de que el Creador, por amor infinito a la creación, perdona libremente los pecados de la humanidad y que no hay esfuerzo o trabajo que pueda merecer ese perdón, sino que la gracia de Dios será recibida por aquellos que tengan fe.
Siendo como era tan brillante y osado teólogo, que más adelante traduciría la Biblia entera al alemán, Lutero empleó su formidable erudición para atacar frontalmente lo que percibía como caminos erróneos y corruptos de la Iglesia Católica. En su trayectoria, fue padre de la Reforma y fundador del protestantismo. La creencia de Lutero en la suficiencia de la gracia de Dios y de la fe humana fue la base teológica y existencial que le impulsó a llevar a cabo su desafiante acción de clavar sus 95 tesis en las puertas de la iglesia del castillo de Wittemberg, el 31 de octubre de 1517. Sin embargo, resulta curioso que el concepto de la salvación por la fe no aparezca mencionado en las tesis, que marcaron el comienzo de la Reforma.
En sus tesis Lutero protestaba de forma expresa contra la extendida costumbre entre el clero católico de "vender indulgencias", un pedazo de papel que garantizaba a su comprador la absolución de sus pecados.
Lutero puso seriamente en duda la creencia de que Cristo, María y los santos acumularan un superávit de méritos que la Iglesia pudiera vender. Negó que las indulgencias tuvieran la capacidad de absolver a nadie de sus culpas y las calificó de perjudiciales, porque daban a los pecadores una falsa sensación de seguridad. También defendió la postura de que el Papa no tenía jurisdicción sobre el Purgatorio.Las tesis implicaron un cuestionamiento profundo de los métodos habituales de la Iglesia para conseguir fondos.
En pocas semanas, Lutero se convirtió en un foco de controversia que sacudió a Europa entera. En 1520, el Papa León X se refirió a Lutero como "ese hereje que es como un jabalí en la viña del Señor" y le concedió 60 días para retractarse. Cuando Lutero quemó en público la bula del Papa, quedó formalmente excomulgado y tuvo que ser recibido por unos amigos durante 10 meses, a fin de salvar la vida.
De vuelta a la palestra, Lutero se erigió en un prodigioso predicador y escritor. para él la Iglesia era principalmente una comunidad espiritual, no una jerarquía oficial. Además de empeñarse en acabar con la venta de indulgencias, luchó también por la abolición del celibato en el clero, por el culto a María y a los santos, misas para los difuntos, peregrinaciones, órdenes religiosas y otras instituciones católicas. (Georg Feuerstein)
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