Número 7: es un pensador profundo. Absorberá conocimiento prácticamente de toda fuente. Por ser intelectual, científico y estudioso, jamás aceptará alguna premisa sin haber agotado todas las probabilidades de error y obviamente sacará sus propias conclusiones. Le disgustan las sugerencias ajenas, principalmente porque se juzga autoridad en cualquier tema. Le afecta la injusticia, pero jamás deberá hacer arreglos de cuentas por mano propia ya que esta se le volverá como un bumerang hiriéndose más a él mismo que a la persona que trata de dañar. A veces le desagrada la labor manual. No es tan doméstico como un número 6, ni tan práctico como un 4. Se inclina hacia lo espiritual y filosófico. Si bien puede ser religioso, frecuentemente se inclina hacia la metafísica o cualquier otra materia similar que conlleve investigación científica y no dogmática. Anhela quietud para meditar y vivir su vida interior. Un número 7 debe aprender a vivir solo estando acompañado consigo mismo. Por lo común evitará las multitudes ya que lo entorpece el ruido y así evitar confusiones mentales. Cree que la búsqueda del conocimiento está detrás de la adquisición de comprensión y sabiduría. Su nota clave es la perfección, no la popularidad. Puede parecer frío y distante, pero esto se debe a que está satisfecho con su vida interior plenamente. Es más bien idealista que materialista. Como número 7, deberá confiar en su intuición y aprender a oír la voz de su alma. Puede captar fácilmente un engaño, o reconocer a un individuo superficial. Ama la naturaleza y es afecto con los animales. En la vida puede trabajar como científico, maestro, ocultista, escritor, inventor, filósofo, abogado, actor, analista o líder religioso.
Número 8: si cree en la suerte, jamás deberá confiar en ella, pues su Karma le pide esfuerzo y trabajo sin alejarse de la Justicia Cósmica. Como número 8, puede parecer reprimido. No es menester que eso se concrete si aprendió a imponerse disciplina. Puede tener éxito en amplias proporciones si se mueve cautelosamente, conservando el material que posee y confiando en su propio juicio, pues los número 8 son mentales y bien equilibrados. Si vive con esta regla de oro su misión será cumplida con muy poco esfuerzo de su parte. El símbolo del 8 es un doble círculo. Es el número de Libram la balanza, significando equilibrio y organización. Su aspecto es material, muy semejante a un número 4, pero como doble valor, puede llegar a mayores alturas. Se interesa más por el éxito financiero que por lo espiritual ya que el número 8 es una vibración comercial. La consigna deberá ser "un pie por vez" pues este principio lo conducirá hacia una mayor expansión de sí mismo. En el comercio es apto para triunfar en casi todos los campos, incluso como presidente o gerente de una compañía. Otras perspectivas abiertas son como industrial o ejecutivo. También le atraen las actividades bancarias, asuntos cívicos y política. Si un ocho elige una carrera literaria, por lo común es de escritor o crítico, nunca autor, aunque podría escribir un libro sobre cómo actuar en el terreno comercial.
Número 9: el símbolo del amor es el gráfico del 9; amor universal y amor al prójimo son su ansía. El amor personal NO DEBE SER la aspiración de un número 9 ya que este tipo de amor egoísta es contrariarte. Es un gran hermano de la humanidad. Por su desinterés dará incluso imprudentemente. Su lema debería ser: no des pescado al hambriento, enséñale a pescar. Es compasivo de mente abierta, idealista y siente con facilidad las dificultades y necesidades ajenas, hasta el punto de sufrir el mismo por la desgracia de otros, o más bien, por la impotencia de poder socorrerlos. Si el nombre completo de una persona tiene muchos nueves, ese individuo está capacitado para afrontar todas las situaciones de la vida sin pestañear. Puede perder amigos, dinero y sufrir grandemente si no aprende a vivir como un ser individual e impersonalmente. Podrá triunfar como médico, enfermero, filántropo, abogado, escritor, actor, pintor, bailarín o en labor comunitaria. Un nueve se siente cómodo ayudando a los demás.
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