Para leer los nombres de una persona, hay una clara regla a seguir: todos los números deberán reducirse a un simple dígito final, a no ser que ese total sea uno de los números maestros comunes ( 11 ó 22). De ser así se los retiene sin reducir (sólo a éstos). Por ejemplo, si el total de los dígitos de las letras fuese 24, deberá sumarse 2 + 4 = 6, por lo tanto el 11 no se reducirá a 2 ni el 22 será reducido a 4. Teniendo eso en cuenta, deberás cifrar cada nombre ubicando el número que le corresponde debajo de cada letra. Luego el total de cada nombre redúcelo a un solo dígito y por último suma los dígitos obtenidos de cada uno de los nombres para su reducción final. Si hay varios nombres intermedios deberás omitirlos. Utiliza los nombres activos, que por lo general son tres: el de pila, segundo nombre y si tienes dos apellidos, el que más uses y si estás casada usa el de soltera.
Ejemplo: Daniel Alberto Pérez. El nombre Daniel da 27 (2 +7=9); Alberto suma 28 (2 + 8= 10 / 1 + 0= 1) y Pérez da 34 (3 + 4=7). El total de los dígitos de cada nombre da como resultado 17, el cual al reducirlo a un dígito da 8. Ocho es el número del nombre completo.
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