San Miniato al Monte - Florencia

Uno de los ejemplos más hermosos del estilo románico florentino, lo encontramos en la Basílica de San Miniato al Monte. En la fachada, revestida de mármoles blancos y verdes, con un estilo característico y similar al del Baptisterio de San Juan, destaca el mosaico del siglo XIII que muestra a Cristo en un trono entre la Virgen y San Miniato.
La construcción comenzó en el siglo XI y se prolongó durante más de 200 años El interior de la basílica cuenta con tres naves; las paredes están enriquecidas con frescos del siglo XIV y XV y el suelo, con incrustaciones de motivos geométricos, se remonta al año 1207 y se considera como uno de los mejores de la ciudad.
No obstante, la obra maestra es el nicho de altar con mármoles incrustados encargado por Piero de Medici y diseñada por Michelozzo; es también notable la bóveda de mayólica de Luca della Robbia. En el altar, encontramos un espléndido retablo de San Juan Gualberto con San Miniato, que se remonta a finales del siglo XIV, obra de Agnolo Gaddi. En las bóvedas de la cripta, donde se conservan los restos mortales de San Miniato, también podemos encontrar algunos frescos de Gaddi. El campanario fue reconstruido en 1523. También se destacan otras obras en el coro y en el presbiterio que cuenta con un magnífico púlpito románico del 1207. (www.florencewelcome.com)