Reglas de oro

1. Usar velas con componentes vegetales.
2. Antes de encender la vela tenemos que elevar nuestro pensamiento, nuestro espíritu, tratando de alejar lo mundano y concentrarnos en el pedido concreto que vamos a realizar.
3. Prender la vela en un lugar tranquilo, donde no haya corriente de aire, donde la llama pueda permanecer serena.
4. No prender la vela con encendedores o procedimientos electrónicos. Se debe hacerlo con fósforo de madera, para respetar la tradición, ya que en la antigüedad se las encendía con pólvora. El ruido del golpe de la cerilla es parte de la ceremonia, pues da energía.
5. No trasladar la vela del lugar en donde se ha encendido.
6. Si la vela se apaga, NUNCA debe volver a encenderse, pues esto indica un corte o traba en el pedido efectuado. Si se vuelve a encender una vela apagada, lo único que se logra es obstaculizar el presente y el futuro, alejando el objetivo a alcanzar.
7. Si se desea apagar la vela, hay que asfixiarla, con un vaso invertido, por ejemplo. Es importante recordar que la llama simboliza nuestra propia luz interior.
8. Los restos de la vela deben arrojarse en un lugar donde corra el agua, pues es el elemento que limpia y purifica nuestra energía. NUNCA deben permanecer en el hogar más de 48 horas.(El mágico poder de las velas - Waldo Casal).