La vestimenta del siglo XIII y los girasoles

La desnudez femenina abunda en el libro. Gracias a los pocos personajes vestidos que aparecen en el volumen junto al texto, la mayoría de estudiosos lo han definido como perteneciente al siglo XIII, año 1200 aproximadamente, aunque en una ilustración aparecen dos girasoles (recordemos que estos fueron traídos de América). También se afirma, así lo hace Roger Bacon, que existe una copia enterrada en el sur del planeta (observaremos el concepto pitagórico, enraizado en Bacon, de que la Tierra es una esfera y la certeza de la existencia de América). El heliotropo, conocido como girasol, es un símbolo solar. La forma radiada, las geometrías en espiral y el seguimiento de la luz, son en China alimento de inmortalidad. La luz móvil, un sol giratorio, ornaba las cabezas de los alquimistas e iluminados, también la de los reyes de Asia y en la pintura iconográfica cristiana, se empleaba para honrar santos, ángeles, apóstoles o profetas. Para los indios apaches las raíces del girasol eran sagradas; las portaban como talismán y las hacían servir para encender fuego en un entramado de luz solar y piedras. El sol es una planta con movimiento que gira mientras asciende y levanta su "rostro", busca como el filósofo y contempla como el amante la luz de la belleza. El vitral central de la catedral de Chartres está compuesto de una geometría de cristal y piedras que imita la composición de una espiral ascendente, igual a la que se ve en la nebulosa de Andrómeda o en el juego de las semillas en el rostro del girasol. Esta obra de los constructores de catedrales, transforma la luz en un espectro de colores, como los rayos solares en la fotosíntesis, que unidos a otros elementos (agua, minerales) serán dadores de substancia orgánica para la flor. La catedral gótica es un ser vivo múltiple; sus emisiones, en un simil del universo, crearán la vida en el interior del templo, invitarán a la presencia de lo divino. (El manuscrito de Voynich - Mario M.Pérez Ruiz).