Aniel - Ángel de la Valentía (Del 24 al 28/09)

Pertenece al coro de las potencias. Simboliza el valor para superar las dificultades de la vida y la inspiración de origen divino para el estudio de las leyes el universo. Concede la notoriedad por el conocimiento de las leyes de la naturaleza y la posibilidad de llegar a convertirse en un gran iniciado. Infunde una gran fuerza moral que se revela especialmente en la acción. Brinda creatividad y una cierta voluntad de independencia. Favorece la investigación científica y las profesiones liberales; los oficios de riesgo (doble de cine, explorador, aviador...) y las profesiones relacionadas con la ecología. Su color de vela es el rojo; su sahumerio el jengibre, su planta la amapola y su piedra el jaspe. Oración: "Aniel, dame la fuerza para llegar hasta el final de mis sueños y para intentar la gran aventura que ensanchará mis horizontes. Si elijo el viaje interior, que mi búsqueda sea mágica y haga brillar a las estrellas. Guíame hacia la Luz y protégenos, a mí y a los míos de las tentaciones de la tiniebla". Aniel trabaja en armonía con el ángel Yelahiah. Brindan a quienes protegen una voluntad de hierro y una integridad virtuosa capaz de superar cualquier prueba. Se harán famosos gracias a la energía que ponen en su trabajo y a la vitalidad marciana que les caracteriza. Equilibrados y desprovistos de agresividad, los nacidos protegidos por estos dos ángeles estarán perfectamente integrados socialmente y su notoriedad se afianzará con el paso de los años, sin conocer jamás el eclipse. Dotados de gran generosidad, les encanta regalar cosas a quienes les rodean. Una gran decepción en el inicio de su vida sentimental, les inducirá a buscar el gran amor, aquel que dura toda la vida. Lo conseguirán después de algunas vicisitudes y unos cuantos errores de recorrido. (Emmanuelle Morgane).