UN PASEO PARA CONOCER EL MUNDO DE ESTOS SERES MARAVILLOSOS .....

noviembre 28, 2008

Oración a la Virgen Madre de Dios

Virgen Madre del Cielo,
tus rayos de plata
sanando la luz.
Señora inmensa que pares la vida,
tu hijo y sus llagas
sangrando el Amor.
Ruego y se que tu amparo es inmediato
con tus lágrimas que brillan la virtud de Universo.
Señora, Madre del Cielo,
Virgen Santa, en tus manos me dejo.
La Virgen María ama a cada uno de los hombres; se preocupa por sus temores y dolores y se alegra junto con cada uno de ellos en los momentos de alegría. La devoción a la Virgen, en sus distintas advocaciones, se extiende a lo largo de todas las geografías y todos los tiempos.
Ellas nos recibe con sus brazos abiertos, con la ternura de una madre que ampara, perdona y comprende las debilidades de sus hijos; de allí que la oración señale que en sus manos nos abandonamos pues confiamos en su amor. Es una actitud de total entrega, un "dejarse" realmente en sus manos. María experimentó el dolor a través de la vida y la muerte de su hijo Jesús. Poco después del nacimiento del niño, ya el anciano Simeón le había predicho: " y a ti misma una espada te atravesará el alma"; las lágrimas desde el silencio fueron una constante en la vida de la joven de Nazaret. Ella que sufrió y vivió el horror de la muerte de su hijo en la cruz sabe comprender los dolores humanos. Por su intercesión, Dios escucha nuestros pedidos, no puede negarse a los requerimientos de su madre. Oremos a ella, pues orar es creer que las puertas del Cielo están abiertas a nuestras súplicas. (Los ángeles y sus oraciones - Regina Palermo).

1 comentario:

  1. Me gustó mucho este post.

    Saludos y feliz navidad,
    Mariana

    Gracias.

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