Armonización psicofísica

Cuando hablamos de armonización psicofísica lo que decimos es que las energías positivas y negativas están en equilibrio. Éste equilibrio se materializa en actitudes, gestos y comportamientos serenos, adecuados, que nos permiten sentirnos tranqui- los. Tanto los sentimientos como las emociones generan reacciones y dejan resi - duos que pueden ser negativos o positivos. Sólo basta con que recordemos una si- tuación de enojo y una de alegría o ternura compartida y ya sabemos de qué se tra- ta. Cuando los residuos corresponden a energías negativas nuestro caudal energé- tico se va contaminando al igual que en el mundo de materia densa si no se limpia, la contaminación se va potenciando cada vez más. Nuestra vibración tiene un ran- go más bajo, por lo tanto sentiremos cada vez más "pesados" y es posible que co- mencemos a estar de mal humor y hasta a veces veamos que estamos agresivos al punto de que el mundo de nuestras relaciones comienzan a alterarse. Muchas veces nos hemos encontrado ante niños de esos catalogados como "violentos", los que en su mayoría nos dicen "no sé que me pasa", "no lo puedo evitar"; si bien creíamos en sus palabras, en esos momentos no entendíamos qué fenómeno ha- cía que ésto fuera así. Ahora sabemos que se altera la frecuencia vibratoria y que en ese caso un niño tratado con técnicas psicofísicas baja notablemente el nivel de ansiedad y violencia. A través de la psicofísica, es posible detectar si el proble- ma energético es externo o si es una combinación entre lo externo y lo interno. Es en éste punto donde la ciencia psicofísica es un importante complemento para el tratamiento de problemas emocionales. Si en algún momento nos encontramos diciendo ¡Qué te pasa? o ¿Qué me pasa?, tal vez parte de la respuesta la encon- tremos en la psicofísica. Prof.Laura W.Quiroga