Fuertes, coherentes, persuasivos, astutos, valientes, pacientes, veraces. Mal aspectados son testarudos, impulsivos e incoherentes.
Su imagen es la de una mujer que está metiendo sus manos con una especial suavidad en las fauces de un león. Este se muestra dócil, tranquilo y sin ninguna intención de dañarla, mientras ella lo mira con amor y dulzura. La mujer representa las fuerzas femeninas que con su paciencia y suavidad son las únicas capaces de amansar a las bestias salvajes. El león sugiere la idea de los bestial e instintivo que hay dentro de los seres humanos y de la única manera que puede dominarse es a través de la aceptación de esta fuerza y del trato suave y paciente con ella. La represión o el intento de domesticarla a latigazos conseguiría la exacerbación de la misma.
Los nacidos en los años de este arcano son seres con una gran fortaleza y salud. Sus cuerpos son generalmente robustos y siempre responden a sus exigencias y es por eso que sus dueños los exigen tanto. No es raro que se extralimiten, pues están acostumbrados a que estos les respondan siempre bien. Han domesticado su potencia instintiva haciéndolos más sosegados y cautos. Su misión es unir esas partes internas que luchan dentro de sí buscando cosas totalmente opuestas. El espíritu que sólo quiere alimentarse de sabiduría, amor y paz... y lo animal que está deseoso de alimento concreto, de sexo, que sufre frío, calor, dolor y placer.
Son hábiles en el hecho de reunir sus dos partes, para que fluyan en un mismo sentido. Ellos tienen un modo especial para conciliar sus desentendidos internos y se jactan de ello, viendo a los demás como seres complicados y contradictorios. Sumamente pacientes, pueden aguantar muchas cosas antes de reaccionar agresivamente, pero cuando la medida de la resistencia se rompe, entonces sale la bestia y hace estragos. Son veraces, pues consideran la mentira como un miedo a enfrentar las cosas de la vida. Su rebeldía natural puede ser vencida con suavidad y amor, pero si no se siguen esos caminos para llegar a ellos, cualquier cosa que se haga será insustancial e inútil. Además de sentir que se está tratando de convencer a un león, cabe aclarar que no es sólo un sentimiento, pues quien quiera tratar de hacer cambiar de opinión a uno de ellos sin amor y dulzura, tendrá que vérselas con su león interno, que es una fiera salvaje casi indomable. (Horóscopo del Tarot).
UN PASEO PARA CONOCER EL MUNDO DE ESTOS SERES MARAVILLOSOS .....
junio 15, 2009
La Fuerza (1946/1968/1990/2012)
Fuertes, coherentes, persuasivos, astutos, valientes, pacientes, veraces. Mal aspectados son testarudos, impulsivos e incoherentes.
Su imagen es la de una mujer que está metiendo sus manos con una especial suavidad en las fauces de un león. Este se muestra dócil, tranquilo y sin ninguna intención de dañarla, mientras ella lo mira con amor y dulzura. La mujer representa las fuerzas femeninas que con su paciencia y suavidad son las únicas capaces de amansar a las bestias salvajes. El león sugiere la idea de los bestial e instintivo que hay dentro de los seres humanos y de la única manera que puede dominarse es a través de la aceptación de esta fuerza y del trato suave y paciente con ella. La represión o el intento de domesticarla a latigazos conseguiría la exacerbación de la misma.
Los nacidos en los años de este arcano son seres con una gran fortaleza y salud. Sus cuerpos son generalmente robustos y siempre responden a sus exigencias y es por eso que sus dueños los exigen tanto. No es raro que se extralimiten, pues están acostumbrados a que estos les respondan siempre bien. Han domesticado su potencia instintiva haciéndolos más sosegados y cautos. Su misión es unir esas partes internas que luchan dentro de sí buscando cosas totalmente opuestas. El espíritu que sólo quiere alimentarse de sabiduría, amor y paz... y lo animal que está deseoso de alimento concreto, de sexo, que sufre frío, calor, dolor y placer.
Son hábiles en el hecho de reunir sus dos partes, para que fluyan en un mismo sentido. Ellos tienen un modo especial para conciliar sus desentendidos internos y se jactan de ello, viendo a los demás como seres complicados y contradictorios. Sumamente pacientes, pueden aguantar muchas cosas antes de reaccionar agresivamente, pero cuando la medida de la resistencia se rompe, entonces sale la bestia y hace estragos. Son veraces, pues consideran la mentira como un miedo a enfrentar las cosas de la vida. Su rebeldía natural puede ser vencida con suavidad y amor, pero si no se siguen esos caminos para llegar a ellos, cualquier cosa que se haga será insustancial e inútil. Además de sentir que se está tratando de convencer a un león, cabe aclarar que no es sólo un sentimiento, pues quien quiera tratar de hacer cambiar de opinión a uno de ellos sin amor y dulzura, tendrá que vérselas con su león interno, que es una fiera salvaje casi indomable. (Horóscopo del Tarot).
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