En los anales de la exploración marítima intercontinental por parte de los europeos se puede encontrar un extraordinario éxito astrológico. En 1519 el navegador portugués Fernando de Magallanes zarpó con 5 embarcaciones bajo bandera española en un viaje épico que llegaría a ser la primera circunnavegación mundial. Al llegar al estrecho que actualmente lleva su nombre, el estrecho de Magallanes, se detuvo para esperar a uno de los barcos, el San Antonio, que se había separado del resto de la flota. Al cabo de 6 días la nave aún no había aparecido, así que Magallanes recurrió al astrólogo de la tripulación, Andrés de San Martín, para averiguar qué había sucedido. San Martín, tras consultar sus cartas, respondió que la tripulación de ese barco se había amotinado, había encarcelado a su capitán y había regresado a Europa.Magallanes prosiguió su trayecto hacia el oeste, y aunque fue asesinado durante el viaje, uno de sus barcos volvió a España después de navegar durante 3 años. A su regreso, la tripulación se enteró de que la predicción de San Martín era acertada: el San Antonio había vuelto a Europa exactamente como lo había indicado. (Tony Allan)
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