Paloma

En Oriente estuvo vinculada a la diosa de la fecundidad Ishtar; entre los fenicios, al culto de su equivalente, Astarté y entre los griegos, consagrada a la diosa Afrodita. En la India y en algunas tribus germánicas, una paloma erra guía de las ánimas, pero también ave de la muerte y de mal agüero. Para el Islam es sagrada porque protegió al Profeta en su huida. En la Biblia, tres palomas fueron enviadas por Noé al término del Diluvio, una de las cuales regresó con una rama de olivo en el pico, desde entonces símbolo de la reconciliación con Dios y de la paz. La paloma blanca representa, además, la inocencia y la pureza. En el arte cristiano alude al Espíritu Santo, aunque en ocasiones aparece como analogía del cristiano bautizado o del mártir, con el laurel en el pico o la corona del martirio.Del mismo modo, encarna el alma en estado de beatitud celestial: por ejemplo, posada sobre el árbol de la vida o sobre el recipiente que contiene el agua de la vida. De entre las virtudes cardinales, la paloma sintetiza la templanza y la moderación y una pareja de palomas blancas es, en la tradición popular, símbolo del amor. (Diccionario de Símbolos)