Mudra es un concepto con muchos significados. En cada instante y a cada momento experimentamos la forma de nuestro cuerpo en el espacio físico, de nuestra voz en el espacio del silencio, una posición mística de las manos, un sello o un símbolo, nuestros pensamientos atraviesan nuestro espíritu apareciendo y desapareciendo en el espacio de la mente fundamental relacionada con nuestra vida y sus acontecimientos. Esta es una forma de definir al mudra, el espacio que ocupa en nuestra mente, en nuestros gestos, nuestro cuerpo, nuestra vida y todo lo relacionado al "YO" evolutivo.
MUDRA quiere decir "símbolo". No solamente es un símbolo aquello que decimos, sino también la manera, la entonación y la forma en que hablamos, la postura de nuestro cuerpo, nuestros gestos, nuestras expresiones. Somos el propio símbolo de nosotros mismos. La unidad de nuestro cuerpo, nuestra palabra y nuestro espíritu es nuestro mudra. Todo lo que constituye nuestro ser, habla igual que todo espacio, su forma y sus colores. Igual que todo fenómeno manifestándose en el momento en que aparece y el contexto que le envuelve. Los símbolos se refieren a la dimensión simbólica de la conciencia, al facultad de expresión y de comprensión del sentido de nuestro espíritu. Cuando penetramos en un espacio, tanto si se trata de una estancia como del claro de un bosque, en primer lugar debemos sentir ese lugar y todo el potencial que está a su alrededor y lo que contiene. A su vez, los mudras estimulan determinados ámbitos de nuestro cerebro o de nuestra alma y ejercen sobre ellos la influencia que les corresponde. (J.L.Nuag).
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