Dante Alighieri - La Divina Comedia

Dante Alighieri (1285-1321) es el más grande de los escritores y poetas de la Edad Media tardía. En La Divina Comedia, Dante viaja al Infierno, al Purgatorio y finalmente al Cielo, no sólo para glorificar a Dios, sino para pintar un gigantesco u minucioso fresco de las locuras y pecados del pasado y del presente y de paso, santificar la memoria de Beatrice Portinari, su gran amor. Según Borges, que la obra esté escrita en primera persona "no es un artificio gramatical"...significa algo más, significa que Dante es uno de los personajes de la "Comedia". Y como personaje, en su viaje al Infierno y al Purgatorio es acompañado por el poeta Virgilio, mientras la angelical Beatrice le guía en las sagradas esferas del cielo. De este modo cuando llegan a la novena esfera, el poeta ve un punto de penetrante luz rodeado de 9 círculos de fuego, siendo el de la llama más clara, el más cercano al centro, "porque, según creo, participa más de su verdad". Los 9 círculos o esferas son la jerarquía angélica, en relatos de Beatrice: "...ella dijo: Los círculos primeros/querubes te han mostrado, y serafines/ A sus vínculos siguen tan ligeros/ porque de parecerse al punto tratan/ y más ven y más logran los primeros/ Los amores que en torno se arrebatan/ se llaman tronos del divino aspecto/ y el ternario primero ellos rematan.(...) El siguiente ternario que así irrumpe/ en esta primavera sempiterna/ que el Ariete nocturno no interrumpe/ perpetuamente Hosanna desinverna/ el triple himno de trinas calidades/ de la misma leticia en que se enterna/ En esa jerarquía hay más deidades/ virtudes hay y antes dominaciones/ y el tercer orden es de potestades/ danzan en penúltimas secciones/ principados y arcángeles y giran/ y la última es de angélicas canciones/ En la altura estos órdenes se admiran/ y hacia Dios, lo de abajo sometiendo/ todos tirados son, de todos tiran" (Paraíso, XXVIII). De acuerdo a Beatrice, toda la Creación ocurrió de forma simultánea: Lucifer cayó de la Gracia antes de poder contar a 20. Dante llama al Lucero, Príncipe del Cielo, en lugar de Arcángel. Cayó por orgullo, ella explica a Dante y aquellos ángeles que no le siguieron eran humildes y poseían una visión superior de la Gracia Divina. Enfocados en la luz de Dios y seguros en su propia eternidad, estos ángeles no tienen comprensión ni memoria ni voluntad, tal como el hombre comprende estos atributos. Sus ojos nunca se apartan de Dios. Los críticos han observado que la intensidad es una de las características más notables de La Divina Comedia, una intensidad que impide que el interés decaiga hasta la ultima línea del poema. (Extraído de "Libro de los ángeles" - Rottner).